Hermosillo, Son., (Agencia Informativa de México).- El consumo elevado de azúcar representa un riesgo potencial para la salud, ya que su ingesta desmedida detona enfermedades cardiovasculares, diabetes, obesidad, caries dentales y daño en órganos vitales como riñones. 

El titular de la Coordinación de Nutrición y Dietética del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Sonora, Víctor Panduro Tucarit, explicó que los alimentos azucarados se acumulan en el cuerpo en forma de grasa. 

Señaló que generalmente se encuentran en los productos ultraprocesados, por ello la importancia de leer las etiquetas frontales y los sellos de advertencia. 

“Hay que poner atención especial a los alimentos que consumen los menores, que no excedan la ingesta de golosinas, de bebidas gaseosas, jugos de caja, pastelitos, galletas, entre otros”, anotó. 

Refirió que al evitar que las niñas y niños consuman ese tipo de alimentos, esa es una manera de prevenir que lleguen a su edad adulta con padecimientos del tipo crónicos-degenerativos. 

Aunado a factores como antecedentes familiares, el especialista indicó que los alimentos con alto contenido de azúcares pueden provocar resistencia a la insulina, particularmente si la persona es sedentaria y no tiene hábitos saludables en su alimentación. 

“En el IMSS contamos la estrategia educativa NutrIMSS, en la cual se orienta al derechohabiente como sustituir los alimentos azucarados por alimentos naturales como frutas, las bebidas por agua simple, preferir los jugos naturales o la leche baja en grasa, pero sin agregado de azucares”, señaló.